Este domingo 5 de noviembre, la Unidad Fiscal de Homicidios II, dirigida por Carlos Sale, realizó una audiencia con el objeto de formalizar la investigación, formular cargos y pedir medidas de coerción contra el sujeto apodado “Niño Viejo” (23 años), a quien se lo acusa por ser el presunto autor del disparo que ocasionó la muerte de Daniel Pascual Moalla (44), ocurrida el 1 de enero del 2021 sobre Jujuy al 5.000 de San Miguel de Tucumán.
Siguiendo instrucciones del titular, el auxiliar de fiscal Miguel Fernández lo imputó por el delito de homicidio criminis causa agravado por el uso de arma de fuego, en calidad de autor.
Para sostener la teoría del caso, el MPF valoró el informe autópsico que determinó el ingreso del proyectil por la zona lumbar de la víctima, lo que le ocasionó el shock hipovolémico. Además, Fernández indicó la existencia de los registros fílmicos (ver video) y tres testimonios que lo señalaron.
“En un primer momento, se ve la llegada de la motocicleta y el descenso del imputado. En el forcejeo la víctima cae. Y en el segundo momento (de la huida), se observa cómo abandonan el motovehículo sustraído (tenía colocada la traba de seguridad) y subirse después ambos al rodado en el que arribaron al lugar”, indicó el investigador, quien precisó que para el mejoramiento de las imágenes se utilizaron dos softwares, practicados por el ECIF en nuestra provincia y por su par (CIF) en Salta.
Para solicitar el plazo de seis meses para la prisión preventiva, el investigador se basó en los peligros procesales (de fuga y entorpecimiento de la investigación).
“El acusado, en esta audiencia, dijo que no posee un domicilio y que se encuentra en situación de calle. Ha demostrado las facilidades de permanecer oculto, mientras era requerido desde el 7 de septiembre del año pasado”, afirmó.
Sobre las tareas realizadas por el Equipo Científico de Investigaciones Fiscales (ECIF), a través de la Dirección de Análisis Criminal y Planificación de la Persecución Penal que permitieron su aprehensión ayer sábado, a las 03:00 horas en un domicilio del barrio ATE, Fernández señaló siete informes que establecían cómo el imputado cambiaba de líneas telefónicas y de inmuebles.
“Esto pone en evidencia las habilidades y facilidades de permanecer ajeno. La pena en expectativa es de prisión perpetua. Si bien la investigación penal preparatoria se encuentra concluida (por este hecho, su cómplice Víctor Eduardo Navarro fue condenado a la pena de 20 años de prisión) falta el informe antropométrico para comparar su fisonomía con la que presenta el video y el análisis del teléfono secuestrado durante el allanamiento”, detalló el Auxiliar de Fiscal.
Luego de escuchar el pedido de justicia por parte de la hermana de la víctima, la jueza interviniente resolvió hacer lugar parcialmente a lo solicitado por el MPF pero por el plazo de tres meses. A continuación, la magistrada ordenó su traslado al servicio penitenciario provincial.
El crimen
El 1 de enero de 2021, cerca de las 06:45 horas, Moalla se encontraba a bordo de su motocicleta Honda CG en la puerta de su domicilio ubicado en calle Jujuy al 5.000 de esta capital, luego de celebrar fin de año con su familia. En esas circunstancias, se hicieron presentes Víctor Eduardo Navarro, alias “Chuly” y Walter Nicolás Baracho, apodado «Niño Viejo», en un motovehículo conducido por el primero. Previo acuerdo de voluntades y división de tareas, fue que “Niño Viejo” portando un arma de fuego, bajó del rodado, se aproximó a la víctima, lo apuntó y le exigió la entrega de su teléfono celular y su moto. En esos momentos se produjo un forcejeo en el que el atacante le disparó a la víctima en la región lumbar, para luego subir a la moto del docente y abandonar el lugar. Pero a los pocos metros, Baracho abandonó el rodado, ya que tenía traba de seguridad y volvió a subirse a la motocicleta en la que había llegado para emprender con Navarro la huida del lugar.