Por Marco Lamoglia, desde Nantes, especial para eltucumano.com. Pasó la ultima fecha de la fase grupo de la Copa del Mundo Francia 2023, y el equipo argentino logro un sufridísimo pase a cuartos de final, tras superar a Japón 39 a 27, pero no le sobró absolutamente nada en el juego y dejó mucho que desear de cara al choque con Gales, el próximo fin de semana.
En las formaciones fijas, el line supo mantener una buena solidez que no tuvo el scrum, el cual fue por demás peleado y parejo. Asimismo, la defensa de Los Pumas fue de los puntos mas flojos. La línea de tres cuartos tackleó poco y nada, y lo pagó muy caro. Todos los tries del equipo japones llegaron por esos lados, y eso sumado la falta de una voz lider dentro de la cancha, se sintió y mucho.
Los Pumas perdieron pelotas increíbles, el manejo de mano no fue de los mejores y cometieron muchos errores propios. Por su parte, la pareja de medios japonesa leyó muy bien el partido y supo mantener a su equipo en la lucha hasta los ultimos 10 minutos, pero, por suerte, no alcanzó.
El trabajo de Mateo Carrera merece un parrafo aparte. El wing de Falcons fue una maquina letal y no perdonó en los metros finales. Supo definir perfectamente las pocas situaciones que tuvo, y terminó con tres tries porque la pelota no le llegó mas veces.
Muchas son las cosas que tiene que corregir Cheika de cara a cuartos ante Gales. No solo la defensa, ya que en ataque, cuando tuvo la pelota, no hubo profundidas ni constancia en el manejos, pero no todas son malas. Es para destacar que, la mayoria de las veces que los argentinos pasaron mitad de la cancha, se fueron con puntos, y eso no es poca cosa, aunque con los dragones eso muy difícilmente alcance.
No queda margen para el error. Sin una pareja de medios sólida, es dificil que el equipo juegue o intente jugar bien. Un medioscrum que no pasa por su mejor momento y un apertura, que no es apertura no sirven para meterse entre los cuatro mejores.
El cierre del analisis queda exclusivamente para Nicolás Sánchez, Matias Moroni y Agustin Creevy. Los dos primeros jugaron poco menos de 20 minutos, suficientes para acomodar la defensa y cerrar el partido, pero eso, con Gales, no alcanzara. Y lo del hocker preocupante. Con un Julian Montoya cansado y muy golpeado, Cheika apenas puso al excapitán apenas tres minutos, raro para el jugador que mas veces vistió la camiseta argentina. Por eso pregunto sencillamente: Michael, ¿hasta cuándo?
Los Pumas deberán alcanzar la excelencia para vencer a Gales.-