jueves, 7 agosto, 2025
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Nueva cepa Covid 2025: estos son los síntomas de la variante Frankenstein

El último Boletín Epidemiológico Nacional (BEN), publicado anteayer, fue revelador. Las autoridades sanitarias confirmaron allí que ya se detectaron en la Argentina los primeros casos de la variante XFG del nuevo coronavirus, también conocida como “Frankensteinpor combinar dos variantes de ómicron. A mediados del mes pasado había llegado a Brasil. Se la asocia con algunos síntomas particulares, si bien especialistas consultados aclaran que todavía no se observa su impacto en los consultorios locales.

El dato surge del informe de vigilancia genómica incluido en el BEN. Detalla que esta nueva variante fue identificada en un 3,37% de las 89 muestras analizadas entre marzo y julio pasados. La variante más común en el país durante esos meses fue LP.8.1, con un 28%, seguida por XEC (9%) y otras cepas menores. Sin embargo, al observar únicamente el último período, entre las semanas 25 y 28, más de la mitad de los casos corresponden a la variante XFG, lo que da cuenta de un crecimiento similar al ya identificado en otros lugares del mundo.

A nivel mundial, XFG fue reportada por 38 países hasta el 22 de junio y su presencia creció rápidamente: pasó del 7% al 22% de los casos secuenciados en solo tres semanas. El aumento se observó especialmente en Asia, Europa y América.

Los síntomas habituales del Covid son fiebre, dolor muscular, tos, resfrío, malestar general y dolor de cabeza

De todos modos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS), el riesgo para la salud pública se considera bajo. Especialistas argentinos coincidieron con esta evaluación. No obstante, algunos países del sudeste asiático reportaron aumentos en los casos y hospitalizaciones, no hay señales de que esta variante cause una enfermedad más grave que otras.

“La nueva cepa es resultado de la combinación de dos variantes de ómicron que dieron esta cepa distinta. De momento es considerada solo como una variante bajo observación”, explicó la infectóloga Elena Obieta, miembro de la Sociedad Argentina de Infectología (SADI). Y aclaró: “No parece más contagiosa ni más letal para el pulmón”.

Consultada sobre si XFG está asociada a algún síntoma particular, como sucedió con variantes previas, Obieta respondió: “Hay reportes de dolor de garganta –más frecuente e intenso– que en otros linajes“.

Ángela Gentile, jefe del Departamento de Epidemiología del Hospital de Niños Ricardo Gutiérrez, refirió: “Puede incluir también pérdida de audición, debilidad extrema, boca seca, erupciones cutáneas e irritación, además de los síntomas clásicos como fiebre, tos y dificultad para respirar. En algunos casos, el dolor de garganta como síntoma inicial es muy importante”.

Cabe recordar que por lo general el Covid presenta fiebre, dolor muscular, tos, resfrío, malestar general y dolor de cabeza, enumeró Obieta. “La circulación de Covid en este momento es muy baja y no estamos viendo aún en términos generales esta variante en consultorio”, aclaró a LA NACION Gentile.

Dolor de garganta, disfonía o ronquera pueden aparecer con más frecuencia ante esta varianteUnsplash

Pablo Bonvehí, jefe de Infectología del Cemic y miembro del Departamento Científico de la Fundación Vacunar, explicó: “En relación a esta variante, no hemos visto todavía casos en internación, posiblemente haya casos ambulatorios, pero sabemos que la mayoría de los casos hoy no se testean, entonces no podemos saber más allá de los testeos que se hacen en las unidades de monitoreo ambulatorio, denominadas UMA, a nivel público. Indudablemente en esas unidades se ha detectado esta variante, que se encuentra bajo monitoreo para ver cuál es la evolución”.

XFG, continuó el especialista, depende de dos sublinajes de la variante ómicron. “Los sublinajes van entremezclando material genético, generando nuevos sublinajes, los cuales muchas veces tienen mayor capacidad –como este caso– de evadir la respuesta inmune de la persona una vez que se infecta y mayor facilidad para generar síntomas. Son los habituales: fiebre, dolor de garganta, tos, cansancio, congestión nasal; puede provocar a veces síntomas intestinales y posiblemente con algo más de frecuencia disfonía o ronquera, según algunos datos del boletín epidemiológico», describió.

En sintonía, la infectóloga Leda Guzzi sostuvo: “No se conoce mucho de esta variante, pero sí se conoce lo más importante, y es que no tiene mayor impacto clínico. No está asociada a una mayor gravedad de los cuadros clínicos, ni a una mayor tasa de internación, ni al hecho de poner en atención al sistema de salud. Después, se le atribuye un mayor grado de afectación tanto de la laringe como del tubo digestivo. Esto se expresaría con mayor probabilidad de cuadros de disfonía, afonía, y también cuadros de diarrea y dolor abdominal. Son datos preliminares que todavía hay que validar con gran cantidad de casos”.

Ante el permanente surgimiento de nuevos linajes del virus SARS-Cov-2, Obieta recordó la importancia de “mantener altas las coberturas de vacunación, no solo para Covid (las vacunas que tenemos parecen dar protección cruzada), sino también para gripe y neumonía si corresponde”. Gentile coincidió: “Las vacunas siguen siendo efectivas”.

También Bonvehí destacó la necesidad de la inmunización. “Lo importante es que las personas se vacunen. Hoy en la Argentina tenemos a nivel público las vacunas de ARN mensajero, y fuera del ámbito público tenemos una vacuna desarrollada enteramente en el país, que es una vacuna recombinante proteica. Si bien estos nuevos sublinajes que van apareciendo por ahora no implican mayor gravedad, en personas con algún grado de comorbilidad o de edad muy avanzada, y sobre todo las personas con inmunosupresión sí pueden generar alguna complicación. Entonces, las personas que hace más de un año se hayan dado la última dosis de cualquier vacuna contra el Covid deberían aplicarse hoy una dosis de cualquiera de las vacunas disponibles en nuestro país. Y las personas que tienen inmunosupresión, si han pasado más de seis meses deberían darse un refuerzo también”.

Frente a la nueva cepa, los infectólogos destacan la necesidad de sostener la vacunación Getty Images

Guzzi, que miembro de la SADI e infectóloga de la Clínica Olivos y del Hospital Santa Rosa de Vicente López, reforzó: “Es muy importante en este momento recordar la relevancia de la vacunación para los grupos de riesgo, especialmente las personas añosas y las personas con enfermedades de base, con comorbilidades, con enfermedades inmunosupresoras, que deben reforzar su vacunación anti-Covid. Diría mínimo una dosis por año. Y para las personas muy vulnerables, o sea, los severamente inmunodeprimidos, son dos dosis por año”.

Según las recomendaciones publicadas por el Ministerio de Salud de la Nación, estos sueros se pueden aplicar junto con las vacunas del Calendario Nacional.

Allí recomiendan que las personas de 50 años o mayores, embarazadas y personas con inmunocompromisos recomiendan una dosis de refuerzo a los seis meses desde la última dosis aplicada y luego continuar con la misma periodicidad.

Los menores de 50 años con comorbilidades no inmunosupresoras, personal de salud y estratégico están calificados como riesgo intermedio por lo que recomiendan una dosis de refuerzo a los seis meses desde la última aplicada y luego continuar con una periodicidad anual.

Por último, las personas entre seis meses y 49 años inclusive sin comorbilidades pertenecen al grupo de riesgo bajo por lo que recomiendan una dosis de refuerzo a los 12 meses de la última aplicada y luego continuar con periodicidad anual.

Los especialistas, a su vez, insisten en mantener las medidas de prevención básicas, sobre todo en personas con factores de riesgo. Recomiendan mantener hábitos básicos de cuidado que son importantes y que con la pandemia se habían incorporado y luego se perdieron, como no saludar con un beso cuando una persona tiene síntomas y ventilar los ambientes.

Según especifica el Boletín Epidemiológico Nacional, luego del ascenso de casos registrado en agosto del año pasado, las detecciones presentaron una tendencia descendente, “con valores bajos en las últimas semanas”, tal como afirmó la infectóloga Gentile. En la semana epidemiológica (SE) 30 (20 al 26 de julio 2025), apenas se registraron ocho casos positivos para entre las 80 muestras estudiadas por PCR. En las primeras 29 semanas de este año los casos se mantuvieron en valores bajos, con 202 detecciones en las últimas dos semanas epidemiológicas (del 6 al 19 de julio).

Aunque el número de casos fue menor en comparación con años previos, se observó un ascenso durante las primeras semanas del año pasado, concentrándose el 80% de los casos entre las SE1 (31 al 6 de enero) y SE12 (17 al 23 de marzo).

El mayor número de casos se registró en el verano entre las SE03 (14 al 20 de enero) y la SE06 (4 al 10 de febrero). Posteriormente, las detecciones semanales disminuyeron y, a partir de la SE32 (4 al 10 de agosto), los casos volvieron a incrementarse, alcanzando un nuevo pico en la SE44 (27 al 02 de noviembre), aunque con una magnitud menor al ascenso previo.

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