Justo en la jornada en la que Estados Unidos le prohibió a Cristina Kirchner ingresar a su territorio debido a las causas de corrupción que posee, la Secretaría de Comercio que depende del Ministerio de Economía dictó una medida preventiva para suspender la adquisición de Telefónica, del Grupo Clarín, por parte de Telecom. Una disposición totalmente acelerada, fuera de los plazos previstos, que originalmente eran de 90 días.
Marzo no terminó y en sólo dos semanas se aceleró todo. Tal como reconstruyó PERFIL en su edición del 9 de marzo, el Gobierno iba a llevar adelante una pulseada contra el Grupo Clarín, con Javier Milei criticando duramente al multimedio. Sin embargo era una pelea de baja intensidad, con tiempos sin urgencia, ante la compra que realizó la compañía por intermedio de una de sus empresas, Telecom, a Telefónica por la suma de 1.245 millones de dólares.
Preparaban un dictamen sobre el proceso de compra, en un trabajo en conjunto entre el Enacom y la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia (CNDC). También iban a intervenir las empresas afectadas por la fusión pero recién en junio. Distintas áreas de los dos organismos iban a intervenir mediante estudios y recomendaciones, como el área de autorizaciones TIC, a cargo de la evaluación del uso del espectro radioeléctrico, capaz de definir si existen excesos o no de los límites que marca la normativa sobre concentración de mercado.
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También, entra en escena una tercera pieza de la ofensiva: el área de Desarrollo de la Competencia de Enacom, que elevaría un informe a la CNDC. Hace dos semanas, fuentes oficiales anticipaban un documento sobre los mercados que se concentran con la fusión Telefónica-Telecom, justificando la medida preventiva.
Precisamente, en La Libertad Avanza marcaban que Clarín buscó tener una posición dominante en el mercado de telecomunicaciones, pasible de sanción ya que si la compra quedaba firme Telecom se quedaría con el 60% del mercado de telefonía móvil y con el 70% del servicio de telecomunicaciones.
Milei y sus colaboradores más estrechos siempre remarcaron estos datos durante las últimas semanas y en redes se encargaron de alimentar la batalla. Un dato que no ha perdido vigencia y refuerza el contexto de la pulseada: al cierre de esta edición, el jefe de Estado sigue teniendo como tuit fijo un largo posteo que hizo contra el multimedio que lleva como título: “Clarín, la gran estafa argentina”. Un texto en el que se detallan los beneficios que obtuvo el multimedio en 2002 bajo la gestión de Eduardo Duhalde y que lleva una promesa del economista: “Voy a defender a los argentinos del abuso de posición dominante que el Grupo quiere tener en el mundo de las telecomunicaciones”.
Bajo este marco, el Gobierno pateó el tablero, se salió una vez más del libreto original y decidió suspender los efectos de la compra a través de la Secretaría de Comercio por una recomendación de la CDNC. Ante la consulta de PERFIL, en la Casa Rosada no dieron explicaciones sobre la aceleración de la ofensiva.
En el texto que difundió la oficina del Presidente, se menciona que la compra “resultante de la operación implicaría una concentración del 61% para el mercado de telefonía móvil; 69% para la telefonía fija y, respecto al servicio de internet residencial, en algunas zonas del país la concentración podría llegar al 80%”.
“El proceso de evaluación de los efectos de la adquisición notificada a la Comisión Nacional de Defensa de la Competencia exige el máximo rigor, respetando la normativa aplicable y los estándares internacionales, en atención a la relevancia que tienen las telecomunicaciones en el mundo actual”, se añadió.
Por lo cual, a partir de la recomendación formulada por la CNDC, se tomó la decisión “de resguardar la transparencia y libre concurrencia del mercado mediante la medida preventiva hasta tanto se profundice el análisis de la operación notificada”.
“A través de la medida, el gobierno nacional cumple con su obligación de garantizar los derechos de los usuarios y consumidores, así como de defender la competencia contra toda forma de distorsión de los mercados”, expresó la administración libertaria en un texto que apareció en medio de los cruces en la red social X entre el Presidente y Cristina Kirchner.