El Instituto Nacional de Antropología e Historia (INAH) denunció un nuevo ataque al patrimonio arqueológico de Cuatro Ciénegas, en el estado de Coahuila, tras el saqueo de pinturas rupestres en la Sierra de Australia, un sitio de gran relevancia histórica y cultural.
Según informó el INAH, los responsables utilizaron herramientas como taladros y esmeriles para desprender piezas de arte rupestre que datan de más de 400 años, causando daños irreparables en el proceso.
Entre las obras afectadas se encuentra una emblemática pintura de una mano roja, considerada uno de los principales atractivos turísticos de la región.
El saqueo fue detectado por guías turísticos que frecuentan la zona conocida como la cañada de La Lagartija, ubicada a 67 kilómetros de la cabecera municipal de Cuatro Ciénegas. Este lugar, que se encuentra en propiedad privada, había sido previamente protegido por el INAH debido a su importancia como referente del arte rupestre indígena.
Los recientes actos vandálicos han generado consternación tanto en la comunidad local como entre los especialistas en conservación del patrimonio.
El historiador y cronista regional Carlos Gutiérrez Recio expresó su preocupación por este incidente, señalando que no es la primera vez que el patrimonio cultural de Cuatro Ciénegas se ve amenazado.
Gutiérrez recordó a medios locales que este saqueo se suma a una serie de robos previos en la región, lo que evidencia un patrón de vulnerabilidad en la protección de estos bienes históricos.
Entre los antecedentes más destacados, se encuentra el robo de la momia conocida como “Jorita” en 1996, la cual fue recuperada posteriormente en un operativo en Nuevo Laredo, Tamaulipas.
Además, en 2008, más de mil piezas arqueológicas fueron sustraídas de la Casa de la Cultura de Cuatro Ciénegas, aunque algunas de ellas lograron ser recuperadas años después con la colaboración de autoridades estadounidenses.
El director del INAH en Coahuila, Francisco Aguilar Moreno, ha solicitado a las autoridades estatales reforzar las medidas de vigilancia en los sitios arqueológicos de la región.
Según el INAH, la colaboración entre las instituciones gubernamentales y la comunidad local es crucial para evitar que estos actos de saqueo continúen afectando el patrimonio cultural. Además, el instituto ha presentado una denuncia formal ante la Fiscalía General de la República (FGR), con el objetivo de identificar a los responsables y prevenir futuros ataques.
Las pinturas rupestres de Cuatro Ciénegas son un testimonio invaluable de las expresiones artísticas y simbólicas de las comunidades indígenas que habitaron la región hace siglos. Su desaparición implica la pérdida de información clave para comprender el desarrollo histórico y cultural de esta zona del norte de México.