Tal y como estaba previsto, desde ayer al mediodía se desarrolló el paro por 24 horas dispuesto por los gremios de pilotos y tripulantes de cabina de Aerolíneas Argentinas por demandas salariales.
En esta oportunidad, el paro afectó a unos 37 mil pasajeros debido a la cancelación de 319 vuelos de Aerolíneas Argentinas.
La medida de fuerza fue llevada adelante por la Asociación de Pilotos de Líneas Aéreas (APLA) y la Asociación Argentina de Aeronavegantes (AAA), y afectó directamente a los servicios de línea de bandera que debían volar entre las 12 de ayer y las 12 de hoy.
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Por otra parte, antes de que se desarrollara el paro, Aerolíneas Argentinas despidió a tres pilotos por negarse a operar dos aviones que debían ser devueltos. La medida fue rechazada por el gremio (ver aparte).
Pasadas las 18, y a modo de balance de la jornada de conflicto, desde el gremio de Aeronavegantes difundieron un comunicado en el que señalaban que “a seis horas de haberse iniciado la medida de fuerza planteada para el día de hoy que se extenderá hasta las 12 del mediodía del día de mañana, tenemos que decir que el acatamiento de parte de los compañeros y las compañeras es total, es del 100%, que la empresa decidió cancelar la operación para el día de hoy y que lamentábamos llegar a esta situación, es producto de una nula propuesta razonable y superadora de parte de las autoridades tanto de la empresa como del Gobierno, seguimos sin recibir un llamado y por lo tanto entendemos que ellos son responsables absolutos de haber forzado la situación en la que nos encontramos”.
Atento a estas declaraciones, desde la aerolínea de bandera aseguraron a PERFIL que “la posibilidad de negociar está abierta, siempre y cuando las medidas se interrumpan. Mientras haya una medida en pie, no va a haber ningún tipo de diálogo abierto”.
“De hecho, había una especie de intercambio relativamente fluido, tratando de acercar posiciones, pero después del paro de nueve horas, ese diálogo se cortó. Al punto que se había hecho una propuesta mejoradora que no fue aceptada por la otra parte”, revelaron las fuentes consultadas.
Desde el Gobierno nacional advirtieron que “aplicará sanciones que van desde descuentos hasta el despido para quienes no cumplan con la nueva reglamentación dispuesta desde Casa Rosada”, que en las últimas horas declaró “servicio esencial” a la actividad aeronáutica. Al menos así lo informó el secretario de Transporte, Franco Mogetta: “Quienes no se adecuen con sus tareas a partir de esta reglamentacion, los que incumplan, serán sancionados. La escala va desde descuento de haberes hasta despido”, sostuvo en declaraciones a Radio Mitre.
En la misma dirección, el funcionario nacional remarcó que toma cada vez más fuerza la idea de correr del directorio de la aerolínea de bandera a Pablo Biró. “Vamos a avanzar con la exclusión de Biró del directorio de la compañía. Le vamos a reclamar al sindicato las pérdidas que se generaron con las medidas de fuerza que oscilan entres los 2,5 y 3 millones de dólares”. Según fuentes de la estatal aérea, el proceso de expulsión puede demandar un mes hasta su concreción.
Además de estos sindicatos, a la medida gremial se sumaron los afiliados al gremio del personal de rampa que organizó asambleas informativas, tanto en el Aeroparque Jorge Newbery como en el Aeropuerto Internacional de Ezeiza.
La medida fue anunciada por el gremio APA, que abarca a los trabajadores de Intercargo, a través de sus redes sociales. “En el mediodía de hoy (por ayer) se realizaron reuniones informativas con los trabajadores de ese turno (mañana), en Ezeiza y Aeroparque”.
Más adelante en el comunicado, el gremio señaló que “las medidas continuaron en el transcurso de la tarde ante la falta de respuesta de las autoridades de la empresa y de la Secretaría de Trabajo, que, desde el lunes se comprometió a destrabar el conflicto y todavía no hizo nada. Las y los trabajadores esperan que la negociación paritaria disminuya la brecha, que ya supera el 75%, de Salarios por debajo del nivel de inflación”.
La medida de los trabajadores que prestan el servicio de rampa, llegó a un punto en que uno de los vuelos internacionales (ITA) que ya estaba listo para partir con todo su pasaje embarcado, no recibió la asistencia del tractor que realiza el movimiento del avión hacia la calle de rodaje para luego iniciar su desplazamiento hacia la pista y como consecuencia no pudo despegar y debió desembarcar a los pasajeros hasta el momento en que culminasen las asambleas.
Otros vuelos internacionales previstos para esa franja horaria, trasladaron su despegue para después de las asambleas.
Las asambleas informativas de APA anunciadas ayer se concretaron en medio de una inesperada polémica generada por la actitud de su secretario gremial, Edgardo Llano, quien en oportunidad de las últimas asambleas realizadas en Ezeiza, tomó un avión con destino a Madrid antes del inicio de las mismas. Es decir, mientras que a los pasajeros se les suspendían sus vuelo, Llano, su esposa y sus cuatro hijas, aterrizaban en España.
Rechazan los despidos
La Asociación de Pilotos de Línea Aérea (APLA), liderada por el sindicalista y miembro del Directorio de Aerolíneas, Pablo Biró, rechazó los despidos de pilotos anunciados por Aerolíneas Argentinas por considerarlos “ilegales”.
El gremio consideró en un comunicado que la empresa actuó de forma ilegal, ya que los pilotos involucrados y eventualmente despedidos estaban llevando a cabo “una medida de acción sindical legítima, como forma de reclamar un salario justo” y acorde “a las responsabilidades que se nos imponen”.
“La empresa Aerolíneas Argentinas ha despedido a tres pilotos de la flota Embraer de manera ilegal, en tanto estaban cumpliendo una medida de acción sindical legítima. La misma, consiste en negarse a efectuar una operación de devolución de una aeronave EMB-190, como forma de reclamar un salario justo y acorde a las responsabilidades que se nos imponen”, señaló el comunicado de APLA.
Más adelante, el comunicado indicó que “es un hecho gravísimo, que tiene la clara intención de provocar, amenazar y amedrentar a quienes ejercemos nuestro derecho de protesta. La violencia laboral que aplica la Dirección de Aerolíneas Argentinas utilizando el abuso de autoridad, la intimidación, la agresión, el maltrato y las amenazas generan un ambiente hostil que afecta a todos los/las trabajadores/as de la compañía”.