En octubre se celebrarán las elecciones dentro del Colegio de Abogados. A cuatro meses se reactivan las diferencias dentro de la mesa directiva compuesta por composiciones con diferentes posturas.
Esta vez lo que reabrió la disputa entre los miembros de la mesa directiva es el valor del bono profesional. En la mesa directiva del Colegio de Abogados conviven dos facciones con posturas diferentes, que mantienen un enfrentamiento hace años. Durante el último período tuvieron que trabajar en conjunto para el normal funcionamiento del Colegio de Abogados de la capital (CAT).
La disputa tiene lugar por un desacuerdo en el valor del Bono Patente Profesional y el total del monto que abonan los abogados, además de la matrícula. Se enviaron notas al presidente de la Corte, Daniel Leiva con montos distintos: el 30 de mayo Gilli envió una nota a Leiva informando que, a partir del 3 de junio, el bono tendría un valor de $13.000. Mientras que Lucio Martín Terán, vicepresidente del Colegio, envío una nota el 5 de junio en la cual se indicaba que el monto del valor del bono se había retrotraído de $13.000 a $ 10.000.
Durante la mañana de Los Primeros, el presidente del CAT, Rodolfo Gilli, visitó el living para hablar sobre la situación interna de la institución. Gilli, en su presentación, expone que lo que el sostiene es lo estipulado y acordado en el presupuesto aprobado por el Consejo Directivo.
«Si vos alteras ese presupuesto de gastos, tenes un resultado negativo al final del año» afirmó el presidente del colegio.
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La otra cara de la moneda
El jueves de la semana pasada, en diálogo con Los Primeros, el tesorero del Colegio de Abogados explicó la disputa desde la vereda de enfrente del presidente. José Sanchez Martinez explicó que «el presidente del colegio no tiene autoridad para tomar decisiones económicas».