Un trabajador que se encontraba cumpliendo con sus habituales tareas de vigilancia nocturna en la garita de acceso al Aeropuerto Mayor Eduardo Krause, que está emplazado en el interior del Parque Nacional Iguazú se llevó flor de susto al divisar en los aldedores del lugar la presencia de un animal muy raro de ver en esa zona misionera: un yaguarundi (Herpailurus yagouaroundi), un felino que pertenece género puma.
Dueño de un cuerpo alargado y de orejas redondas muy pequeñas, sus rasgos corporales que lo asemejan mucho a los mustélidos, como las comadrejas y las nutrias, lo llevaron a ser popularmente llamado «gato comadreja».
Esta especie de felino es apenas un poco más grande que los gatos domésticos, ya que puede llegar a medir entre 50 a 77 centímetros de largo y hasta 35 centímetros de alto, -a lo que hay que sumarle su larga cola que oscila entre los 33 y 66 centímetros-, en tanto que su peso ronda entre los 4,5 a 9 kilos, siendo los ejemplares machos más grandes y pesados que las hembras.
Otra de sus principales características es que presenta dos tipos de coloración en su pelaje –una es negro grisáceo oscuro, mientras que la otra es rojiza-, y si bien, por lo general color es uniforme, a veces puede ser más claro en la zona ventral. En tanto que, mientras cuando habita en zonas boscosas, suele tener un color más oscuro, cuando lo hace en hábitats secos el color es mucho más claro.